Mori A* – may 2020
Si existe un alimento noble pero a veces mal entendido es la soja, una legumbre consumida por más de 5 mil años y recomendada desde la infancia por expertos y organizaciones reconocidas de salud y nutrición de todo el mundo. Aún así, todavía existen muchos prejuicios y desinformación en nutricionistas y médicos, que solo usa datos anecdóticos o teorías sin fundamentos para desaconsejar el consumo en niños. También usan esta desinformación para realizar guías y material para profesionales, con información falsa.
El consumo de soja, y sus efectos en la salud, se han estudiado por décadas, hoy contamos con más de veinte mil estudios a disposición respecto a la soja y la salud humana. Siendo un alimento con una concentración muy alta de proteínas (el más concentrado en legumbres), y de compuestos fitoquímicos, existen muchos análisis referidos a su impacto en la salud.
En nuestro país, las nuevas tendencias en alimentación, orientadas a patrones vegetarianos, generan dudas y preocupación en el personal de la salud. Pero por miles de años la soja fue un ingrediente clásico de las poblaciones asiáticas, y su introducción en Occidente lleva sólo algunas décadas.
En Argentina existe un gran prejuicio hacia la soja y sus derivados, generado por la mala ciencia o la ciencia basada en estudios que producen evidencias de baja calidad y me atrevo a decir que también por ideologías de otra índole.
Esto es muy frecuente en el ámbito de la nutrición. Lamentablemente existen sesgos personales en trabajadores de la nutrición y se usa la evidencia anecdótica para realizar recomendaciones que coincidan con esas teorías infundadas, como ha ocurrido en esta guía de alimentación complementaria de ASSAL (agencia santafesina de seguridad alimentaria de ministerio de salud) accesibles en https://www.assal.gov.ar/guia-alimentacion-complementaria/ en la cual hacen mucho énfasis en la recomendación de evitar el consumo de aceite de soja y porotos de soja en la nutrición infantil. Suele haber algunos artículos locales que refieren algo similar, sin hacer ningún análisis serio y sin considerar el consenso actual.

La recomendación es la siguiente:
«Se desaconseja ofrecer aceite de soja porque contiene fitoestrógenos, que tienen una actividad similar a la hormona humana estrógeno, la cual tiene la potencialidad de reducir la fertilidad en niños y provocar pubertad precoz en niñas. A los 7 a 9 meses: En esta etapa se diversifica la dieta del bebé y se ofrecen nuevas consistencias. Comenzamos a ofrecer legumbres (porotos, garbanzos, arvejas, lentejas). No soja. »

Los errores de esta recomendación son dos puntualmente: Las isoflavonas solo se presentan en la fracción de proteínas, no se encuentran en el aceite de soja, ni en ningún aceite vegetal. Las isoflavonas también están presentes en proteínas de otros alimentos de origen vegetal. Esto significa que el ACEITE DE SOJA NO CONTIENE ISOFLAVONAS O FITOESTROGENOS. La más completa base de datos de alimentos indica que el aceite de soja no contiene isoflavonas, así como lo indican también todos los análisis químicos de los productos de soja. (1)(2)

El otro error es indicar que los “fitoestrógenos” tienen actividad hormonal. Esto es totalmente falso, y es un tema muy analizado y sumamente comprobado por expertos en el área.
Parte de la práctica diaria de un nutricionista así como de un profesional de la tecnología alimentaria, se basa en desmitificar y aclarar información falsa que es la que suele tener más llegada a la población porque es alarmista y exagerada.
No es fácil para las personas entender los procesos por los cuales debe obtenerse una mejora vegetal, como se logra una semilla, como se produce un determinado producto, cuales son las reglamentaciones que deben respetar para que un alimento salga a la venta, y muchísimos otros aspectos referidos a la tecnología, composición y efecto de los alimentos. Tampoco es tarea sencilla para los nutricionistas y médicos, entender estudios científicos. A veces se comete el error de saltear el consenso actual para caer en estudios aislados y mal diseñados.
Para los verdaderos expertos en un tema específico, poder transmitirlo en un idioma simple también puede ser un desafío. Todo esto da lugar al desarrollo de falas premisas, que se logran instalar en ámbitos informales pero también en lugares académicos, profesionales que “compran” la mala ciencia y se alejan de la nutrición basada en evidencia. Eso es más peligroso, porque una persona con autoridad promoviendo ideas falsas, probablemente tenga mucha influencia. Citar un estudio aislado que contradice el consenso actual, no significa basarse en evidencia.
La soja es considerada un alimento muy completo desde hace miles de años en Asia, hoy en día es parte de la dieta diaria de millones de niños. Por ejemplo en Japón es normal que los niños comiencen a comer productos de soja desde los 6 meses (3). La bebida de soja líquido apareció en China hace unos 500 años y hoy es consumido prácticamente por todos los niños de la región. En Singapur, para el 50% de los infantes de 10 años es su bebida más importante. En Taiwán la bebida más consumida es el alimento de soja líquido (una media de 3 vasos por semana) Aproximadamente el 25% de los infantes en los Estados Unidos recibe fórmulas con aislado de proteína de soja debido a variadas razones que incluyen alergias a las proteínas de la leche o intolerancia a la lactosa. Tanto la Academia Americana de Pediatría como la U.S. Food and Drug Administration apoyan el uso de fórmulas con aislado de proteínas de soja como seguras y adecuadas para la alimentación normal de niños que no pueden ser alimentados con leche materna o de vaca. (4) En 2010 un panel especial expresó una preocupación mínima por los posibles efectos adversos del desarrollo en los lactantes alimentados con fórmula infantil de soya exclusivamente.
Es decir que los niños que no toman leche materna y obtienen sus proteínas totales a partir de fórmulas de soja, el riesgo parece insignificante, no parecería haber una razón lógica para desaconsejar el consumo esporádico o semanal de alimentos como el tofu, proteína texturizada de soja, bebida y yogur de soja, salsa de soja o aceite de soja.
El jugo de frutas con porotos de soja es jugo azucarado y como tal no reemplaza ni se compara con la leche materna o fórmula. Los malos hábitos de higiene dental, la ingesta de jugos, muchas veces, jugos en mamadera, producen el desplazo de otras comidas nutritivas, aumentando el riesgo de caries. La soja no tiene nada que ver con esta posible problemática.
Para quien tenga interés en conocer cómo se analiza el contenido de la soja, cuáles son sus características y efecto del consumo, el material más completo lo podemos encontrar en los análisis y guías de varias instituciones de salud, al final del artículo.
Todos recomiendan el uso de soja en la etapa de infancia así como en la alimentación complementaria de los 6 a 12 meses de edad, principalmente en poblaciones con hábitos vegetarianos, debido a su contenido incomparable en ácido linolénico (precursor de omega 3 EPA y DHA, grasas que forma parte de los tejidos del cerebro y proteínas, así como lisina, que también son críticos en dietas sin alimentos de origen animal.
Vemos que el contenido en una cucharadita tipo de té, en estos aceites es el siguiente: El aceite de girasol contiene 1 mg de omega 3, el aceite de oliva contiene 34 mg, y el aceite de soja 311 mg. (6) La comparación nos muestra la contundente diferencia entre aceites y el valioso contenido del aceite de soja, considerando que la RDA (ingesta diaria recomendada) de ácido linolénico en niños de 7 a 12 meses, es de 500 mg por día (0,5 gr) (5). Es decir que con 3 cucharaditas de aceite de soja se puede cubrir el total de omega 3 de un niño de esa edad, algo imposible de lograr con otros aceites de uso familiar.
Vemos en esta tabla el contenido proteínas totales, hierro y lisina en el tofu, un alimento muy recomendado por su digestibilidad y por su textura en la alimentación complementaria del bebé vegetariano, y lo comparamos con la lenteja y con el huevo, en un total de 50 gramos (peso cocido)

Tofu 50 gramos (5 cucharadas grandes) Lenteja cocida 50 gramos (5 cucharadas grandes)  1 huevo entero cocido, 50 gramos  
5 gr 4,5 6 PROTEINA
300 mg 315 460 LISINA
1,6 mg 1,7 0,6 HIERRO

Fuente: USDA

Mas detalles sobre las recomendaciones de soja en:
• Comité de Nutrición de la Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPGHAN) Documento de posición Alimentación Complementaria Journal of Pediatric Gastroenterology and Nutrition 2017 https://journals.lww.com/jpgn/Fulltext/2017/01000/Complementary_Feeding___A_Position_Paper_by_the.21.aspx

• Sociedad Argentina de Nutrición “Soja, propiedades nutricionales y su impacto en la salud”. Edgardo Ridner – Buenos Aires- Sociedad Argentina de Nutrición,2006 http://www.sanutricion.org.ar/files/upload/files/soja.pdf

• Sociedad Argentina de Nutrición “soja y salud posición sociedad argentina de nutrición Grupo de Trabajo Alimentos” SAN. Mayo 2012 http://www.sanutricion.org.ar/files/upload/files/posicion_soja_y_salud.pdf

• Asociación Española de Pediatría
Recomendaciones del Comité de Nutrición y Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría sobre las dietas vegetarianas 2020 – https://www.analesdepediatria.org/es-recomendaciones-del-comite-nutricion-lactancia-avance-S1695403319303789

• Asociación española de pediatría de atención primaria. Seminario: Niños vegetarianos, ¿niños sanos? 2017 https://www.aepap.org/sites/default/files/253-268_ninos_vegetarianos_ninos_sanos.pdf

• Comité de médicos para une medicina responsable
https://www.pcrm.org/news/health-nutrition/soy-does-not-affect-puberty
Academia Americana de Nutrición y Dietética: Seguridad de productos de soja. Grupo de Práctica Dietética de Nutrición Vegetariana de la Academia de Nutrición y Dietética. 2017 https://vegetariannutrition.net/docs/Soy-Safety.pdf
Academia Americana de Pediatría: Uso de fórmulas a base de proteínas de soja en la alimentación infantil Jatinder Bhatia , Frank Greer y ; y el Comité de Nutrición Pediatría, mayo de 2008, 121 (5) 1062-1068 http://pediatrics.aappublications.org/content/121/5/1062.full

• Chile- Departamento de Nutrición y Alimentos, División de Políticas Públicas Saludables y Promoción, Subsecretaría de Salud Pública del Ministerio de Salud. (Guía de alimentación complementaria, página 22) http://www.crececontigo.gob.cl/wp-content/uploads/2016/01/Guia-alimentacion-menor-de-2.pdf

• El Centro del Programa Nacional de Toxicología (NTP) para la Evaluación de Riesgos para la Reproducción Humana (CERHR) panel de expertos 2009- junta para evaluar la fórmula infantil de soya.
https://www.niehs.nih.gov/health/topics/agents/sya-soy-formula/index.cfm

• Profesionales de la salud veganos del Reino Unido. Tofu en la alimentación de bebes y niños https://plantbasedhealthprofessionals.com/wp-content/uploads/Tofufactsheet-3.pdf

• Nutrients. Soja y actualización de salud: evaluación de la literatura clínica y epidemiológica. Mark Messina. 2016 -https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5188409/

• Asociación Bioquímica Argentina. REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007 – Isoflavonas en soja, contenido de daidzeína y genisteína y su importancia biológica https://www.redalyc.org/pdf/651/65111118009.pdf

Dos divulgadores de nutrición explican la evidencia de forma más sencilla, aquí:
• Nutricionista Jack Norris, nutrición basada en evidencia- https://veganhealth.org/soy-part-2/
• Miriam Martínez Biarge, médico pediatra miembro del Comité Asesor del Grupo de Profesionales Sanitarios Veganos del Reino Unido, https://mipediatravegetariano.com/no-los-fitoestrogenos-no-son-estrogenos-y-la-soja-no-es-un-disruptor-hormonal/

Bibliografía:
1) Base de datos USDA https://www.ars.usda.gov/ARSUserFiles/80400525/Data/isoflav/Isoflav_R2.pdf
2) Soja, alimentos de soya y su papel en las dietas vegetarianas. Nutrients 2018 https://www.researchgate.net/figure/Isoflavone-content-in-soy-foods-1_tbl2_322292620
3) Factores a considerar en la asociación entre la ingesta de isoflavona de soja y el riesgo de cáncer de mama. J Epidemiol . 2010; https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3900805/
4) Libro “Soja”. Sociedad Argentina de Nutrición Soja, propiedades nutricionales y su impacto en la salud Edgardo Buenos Aires- Sociedad Argentina de Nutrición,2006 http://www.sanutricion.org.ar/files/upload/files/soja.pdf
5) Recomendaciones diarias de ácidos grasos. RDA https://www.nap.edu/read/10490/chapter/10 Página 469
6) Base de datos USDA https://nutritiondata.self.com/facts/fats-and-oils/7952/2

*Agustina Mori, Licenciada en Nutrición Matricula Nacional 5170